En la escena final de Zama, el protagonista en pleno delirio pre mortem, alucina a su yo de la infancia. Ambos se acusan de no haber crecido. Quique, o simplemente Veneno, el protagonista de esta novela, sufre de esa misma patología. Esa inmadurez, trae consigo otro problema: Veneno es un hombre estancado. Y todo lo que se estanca se pudre. Así avanza por la vida, dejando una estela que contamina todo lo que toca.

Veneno, en algún punto, es el retrato de un antihéroe que podría recordarnos el errar caótico de Ignatius Reilly, el gran personaje de La conjura de los necios de Kennedy Toole. Pero este personaje que deambula entre Burzaco y La Boca, construye su vínculo con el mundo a través de la maldad, el egoísmo, la desidia.

Bermani nos lleva de paseo, con su prosa clara, lacónica, a través de cuatro episodios en la vida de Veneno; desde su adolescencia, sus fracasos múltiples de la vida adulta, hasta el día de su cumpleaños cuarenta. Y hay también espacio para la interioridad: alli aparecen, cristalizados, todos los demonios de Veneno, esa serpiente que, a fin de cuentas, acaba mordiéndose la cola. Cuál es tu veneno, pregunta Leo Oyola en el prólogo de esta edición. Cuál es el veneno de alguien a quien el mundo llama Veneno.

Publicada en 2006, ganadora del Premio Emecé, Veneno tal vez sea uno de los mejores ejemplos

para retratar los vapores de azufre de un infierno personal.

"La apuesta de Bermani pasa por la brevedad y el laconismo de la voz narradora, por un premeditado despojo de toda complejidad en el lenguaje en pos de crear un efecto de inmediatez con lo que se cuenta, rescatando la oralidad barrial y aplanando todo énfasis externo."

Soledad Quereilhac

"Las desventuras de Veneno son como la de ese hermano o amigo descarriado que todos tenemos. Escrita en una prosa áspera pero con una fluidez que incita en todo momento a seguir leyendo, este libro de Ariel Bermani describe una vida que puede ser muchas, infinitas de la Buenos Aires de hoy."

Juan Forn